Orden de Predicadores.

Bar de barrio en mañana de domingo. El Málaga ha caído derrotado por el Betis, siendo tema de conversación principal entre los parroquianos del Yesi, uno de los establecimientos con mejores churros de Málaga.

Servidor, desayunando con Eduardo Nieto, cuando la procesión comienza a aparecer por el fondo. Para casi todos es una sorpresa, más aún cuando el acompañamiento musical era sólo de tambores.

En una parada ante el bar, el padre Eugenio comienza a hablar por el micrófono, en la reflexión de uno de los Misterios, sobre los problemas de las familias del barrio.  En ese momento, todo los del bar callaron, escuchando atentamente las palabras del dominico. Sin lugar a dudas, un momento mágico, que dice mucho del respeto que genera la sencillez y las palabras claras y contundentes de esta Orden de predicadores.